"En este día, 09 de abril de 2013, yo juro que, de ahora en adelante, para siempre, llevaré esta saga en mi corazón."

Fue un 24 de diciembre de 2010 la primera vez que sostuve este libro entre mis manos. Intenté adentrarme en la historia con solo mirarlo, porque lo sostenía y sentí que algo grande, inexplicable estaba apunto de entrar en mi vida para no salir jamás.
Puedo decir que estos personajes me han acompañado en parte de mi adolescencia y sé que me seguirá acompañando hasta el final.
Siempre he sentido una debilidad por los ángeles caidos, por los ángeles en general. Y Patch no se ha quedado atrás, convirtiéndose en uno de mis personajes preferidos, con todo su misterio, con su Jeep, con su gorra, con esas frases que me atravesaban el alma y me llegaban al corazón, con su amor sincero, con su ÁNGEL... Es cierto que, a veces, las ganas de darle un sillazo a Nora no me las quitaba a nadie. Me he reido como nunca con Vee y sus salidas. He odiado a Marcie, a Hank y a Dante... un odio que no tiene fin. He sufrido con Blythe, la madre de Nora. He llegado a querer a Scott como a un mejor amigo. Cada uno de los personajes tienen algo especial que le han dado vida a una historia misteriosa, llena de tensión, amor, amistad... Una historia completa.
Diga lo que diga, escriba lo que escriba, piense lo que piense, nunca podré demostrarle a Becca Fitzpatrick lo verdaderamente agradecida que estoy por haber escrito una historia como esta. Ninguna es comparable con ella. Debo decir que es mi segunda saga preferida, antecida por Twilight.
Y sí, también debo agradecerle a mi tio el haberme regalado un libro tan perfecto ese día de Nochebuena jugando al amigo invisible. 

"If I hadn’t fallen, I wouldn’t have met you." 

— Prométeme que no te alejarás de mi lado. Prométeme que no me harás pasar por esto sola. 
Patch me cogió de la barbilla y me aseguró:
— Si pudiera hacer que todo esto pasara, lo haría. Si pudiera ocupar tu lugar, no lo dudaría. Pero mi única opción es estar a tu lado hasta el final. No desfalleceré, Ángel, te lo prometo. 

Y esto es lo que me da fuerzas para seguir adelante. Porque sé que, vaya donde vaya, siempre tendré un ángel guardando mis espaldas.
Nunca olvidaré esta saga. Puede que haya llegado a su fin en cuanto a papel se refiere, pero el sentimiento perdurará el resto de mis dias, y aquella pluma negra seguirá conmigo hasta el final.



                          Faithfully,

a true Fallen Archangel and Hush Husher.